24/10/09

Paisajes de Sudcalifornia-II. Ecotonos


Se entiende por "ecotono" el encuentro entre dos ambientes distintos.

El ser humano, al alterar los ecosistemas naturales con fines diversos, suele crear ecotonos con distintos niveles de agresividad entre sí.

Pero, como es mi costumbre, no tengo ganas de hablar de cosas amargosas, mejor les mostraré un ejemplo de un lugar en que nuestra injerencia puede considerarse reducida.

Se trata de la zona de "El Mogote", de la que ya he presentado fotografías aquí y acá. Pero en éste caso es un lugar que está un poco antes de lo que es la "cintura" del Mogote, al interior de la Ensenada de La Paz.

Se le llama "Estero Zacatecas", y es uno de los ejemplos que existen en la península de lo que yo aprecio como ambientes extremos.

En esa zona se da, en realidad, no el encuentro de dos ecosistemas, sino de tres. Y es que ahí se encuentra la tierra con el mar y, ya en tierra firme, entre el manglar y la vegetación característica de una zona árida.

Las fotografías que presento las tomé en marea baja. Creo que es el momento ideal para ir a ese lugar, ya que uno puede ponerse a buscar conchas y caracoles más fácilmente. Además si hay marea alta uno puede correr el riesgo de quedar aislado por los "brazos" de mar que pueden invadir el camino de terracería.

En ésta ocasión mi intención es presentarles como, en éste microambiente, el mangle se encuentra rodeado y acosado por los ecosistemas vecinos. Vean.



Pero también se las arregla para tener pequeños espacios en los que la injerencia de las plantas xerófitas es inconcebible, y es que el agua que se ve ahí es hipersalina, es decir tiene más sal que la del mar.

En esos ambientes tiene algunos acompañantes, como estas plantas cuyo nombre genérico es Salicornia.

Y llegan colonizadores cuya posibilidad de éxito es prácticamente nula.

Sin embargo pienso que, pese a la reciedumbre y empecinamiento del mangle, y con todo y sus mañosadas como es su sistema de raíces, acabará siendo "expulsado" de ese sistema.

Pero no tanto por la vegetación aledaña, sino por un par de procesos naturales que le son contrarios; el primero es que la península se está levantando, el segundo es el arrastre de tierra hacia la Ensenada de La Paz como consecuencia de las lluvias, que aún cuando son escasas, provocan su azolvamiento. Ambos procesos se conjuntan para provocar la reducción del hábitat del manglar y, por ende, conducirían a su desaparición en esa zona.

Pero lo que es obvio, es que no tienen la más mínima intención de "rendir la plaza", al menos durante algunos milenios.

Por si no les gustó ninguna foto, aquí les dejó un par de caracoles, que ilustran una de las fuentes de las que está hecha la arena.


RRS