25/3/12

Meyibén


Los indígenas Cochimí dividían el año en bimestres, más que en estaciones. Según Miguel del Barco, misionero jesuita que vivió en la península por 30 años en el siglo XVIII, la correspondiente a la segunda mitad de febrero, y hasta mediados de abril, era llamada “Meyibén”. Es la temporada previa a la época más seca del año.

Me parece que en las fotografías, tomadas hace una semana, se puede apreciar lo extraordinariamente reseco que se va poniendo el entorno, pero también el efecto de la humedad que se preserva en algunas cañadas, particularmente aquellas en las que hay afloración de manantiales minúsculos. Sin embargo, aún en zonas alejadas de esos lugares, puede apreciarse la vitalidad de la vegetación xerófila.

No he encontrado el nombre de la cañada, pero va a un costado de un camino de terracería que une dos antiguos pueblos mineros, uno es “El Rosario”, y el otro “San Antonio”.

Para empezar una vista del palmar que se desarrolla en los puntos en que el agua está más cerca de la superficie.


Según yo, la palmera dominante es la que acá llaman "Palma Colorada" o "Palma de Tlaco" (Erythea brandegeei), me gustan por esbeltas y por ser tan altas.

Aquí les presento otras fotos de cuando íbamos bajando y ya estando abajo. Los árboles que se ven son de mango; yo pensaba que eran mangos "silvestres" (es decir, que habían crecido porque alguien había tirado un hueso por ahí), pero la amiga que me acompañaba, y otro cuate que conoce el lugar me dicen que son un huerto.




Si vuelven a ver la primera foto, se darán cuenta de que estar abajo es algo un poco alucinante, ya que en el lecho no hay cactáceas, y llega a haber un dosel vegetal bastante denso. Con decirles que hasta hay plantas trepadoras tipo lianas. Lo que no nos sorprendió tanto fue encontrar pequeñas represas que propician que el agua se retenga en el manto freático, la cual es conducida a través de mangueras de una extensión considerable, por pura gravedad, hasta los ranchos. Miren si no me creen.



Ahora viene una foto de la floración de un mango. A mi amiga le llamó mucho la atención lo sanos que se veían los árboles, que son tan frondosos que tomarles fotografías resulta bastante difícil.


Y ahora un par de habitantes de las penumbras, primero una libélula, y luego una "mulita" (hormiga solitaria que pica bien fuerte).



Cuando volvimos a subir, nos fuimos encontrando nuevamente con la vegetación característica. Primero un colorín de los de acá, también llamado "Corcho" o "Chilicote" (Erythrina flabelliformis).


También vimos un nopal que estaba "echando" pencas nuevas, lo cual me sorprendió mucho, ya que hace meses que no llueve. Miren como se aprecia que los primordios de hojas se transformarán en espinas.


También nos encontramos cardones con fruto, que muy posiblemente eran parte básica de la dieta de los huchití y otros grupos de la zona en esta temporada. La pulpa tiene buen sabor, aunque no es tan abundante como las de las pitayas. Aparentemente el fruto era usado también como peine, de ahí su nombre científico (Pachycereus pecten-aboriginum).


Y sólo por si se ofrece, y porque a mí me gusto mucho, aquí les dejo otra toma del palmar desde lo alto.


Seguimos camino y nos metimos por otra cañada. Después supimos que esa nos llevaba al Rancho "Las Flores", como podrán ver, utiliza parcialmente una construcción que nos dijeron que contaba con más de 300 años. Dudo que sea tan vieja, pero si me creo que fuese del siglo XIX.






Y aquí otra muestra de las cosas que se ven en esos microambientes. Un par de pitayas creciendo sobre el tronco de un mezquite. La verdad es que con el tiempo y tanta paseada ya lo he visto muchas veces en varios lugares, pero también es cierto que no deja de maravillarme su vitalidad y ganas de medrar en cualquier circunstancia.


Ya para acabar, y para que no vayan a decir que eso del distrito minero es pura invención mía, aquí les dejo tres fotos, la primera es el socavón o respiradero de una mina (de lo más peligroso, ya que está a ras del suelo, sin señalamientos y cae casi en vertical). Luego está un avispero que está ahí, como de guardián. Por último es la foto de la chimenea de uno de los varios "beneficios" que hay en la zona. Ya luego les pondré otras fotos más explicativas y lucidoras.




Espero que el paseo les haya gustado.

RRS