2/10/12

"El Pulguero"

 
Después de mucho tiempo de no hacer nada por aquí, sobre todo por falta
 de tiempo e inspiración, me animo a venir a platicar de una de mis playas 
preferidas, que tiene el extraño nombre de “El Pulguero”.

“El Pulguero” es un campamento pesquero que tiene una antena de
 radio, lo cual lo hace una referencia importante, ya que en caso de que 
una embarcación tenga un apuro es uno de los puntos desde el que se 
puede dar algún tipo de ayuda, o cuando menos repetir la petición. Sin 
embargo en el par de ocasiones en que he ido este año, ha estado 
prácticamente desocupado, excepto en las tardes en que han llegado 
unos cuantos pescadores a trabajar. Supongo que debe ser cosa de la 
temporada de pesca, ya que debe haber unos diez “resguardos” de lo más
 precarios, que es donde se quedan a descansar. Miren, ese es el 
campamento.

 “El Pulguero” se encuentra en el Golfo de California, en el límite oriental 
de la Bahía de La Paz. La playa ve hacia el norte, de tal forma que casi 
enfrente, a poco más de 7.5 kilómetros, se encuentra la isla de Espíritu 
Santo. Como nota aparte, de los grupos indígenas que habitaron la 
península, el único que se hacía a la mar y extraía perlas por buceo libre 
era el de los pericú. Hay evidencia arqueológica de que ellos visitaban 
esa isla. Aquí está una vista de la isla.
  
¿Por qué me gusta tanto? En primer lugar porque su playa es muy 
variada, además de limpia, tiene secciones con arena fina y otras donde 
predominan rocas grandes o piedras de menor tamaño, por lo que es 
posible encontrar variedad de cosas, bueno, sobre todo piedras lisas. 
Además el mar es somero unos cuantos metros, para después permitir 
nadar con visor y aletas. Como en las cercanías hay rocas, es posible 
observar peces y otros organismos en un entorno muy seguro. El oleaje 
es muy tranquilo y, pese a la cercanía del campamento, yo diría que es un
 lugar en el que es fácil sentirse aislado.

Aquí una viendo hacia el este:

Y acá viendo hacia el oeste:
  
Claro, para muchos tiene varios inconvenientes, como es que no hay 
absolutamente ningún tipo de servicios, sean sanitarios o de alimentación,
 así que hay que transportar hasta ahí cualquier cosa que uno pueda 
requerir. Además el camino no está pavimentado,
de hecho es una terracería que en algunos tramos es un poco pedregosa,
 pero me parece que eso contribuye un poco a disfrutar más el lugar. 

Yendo hacia el oeste, hacia un pequeño islote que está en la punta, se
 pueden ver formaciones y cosas así:





  
A mí me ha tocado ver que hay personas que van al islote a pescar,
 aprovechando que el canal es bastante somero. Desde tierra se ve así: 
  
En el islote nos encontramos gaviotas con nido, llama la atención el 
parecido de la coloración de los huevos con el de algunas partes del 
terreno.

  
Por el islote también vimos a estos pájaros, a los que les llaman 
ostioneros americanos.


Pero como dije inicialmente, una de las cosas más entretenidas que se 
pueden hacer ahí, además de nadar, es ponerse a juntar piedras como 
estas.

  
Pero, sin duda, lo más impresionante es la ola que petrificaron los
 pericúes, miren si no.



Por eso digo que esos si eran hechizos de los buenos.

RRS