31/12/09

"El Mogote"-III

Vengo a darme cuenta de que, por falta de carro, tomé pocas fotografías durante este año. Lo que es curioso es que salí con varias amistades, pero como a ellos no les gusta tanto la fotografía, como que me inhibo.

La consecuencia final de todo esto es que creo que sólo salí a tomar fotos a gusto como cinco veces, y tres de ellas fueron a "El Mogote".

Me he dado cuenta de que ese lugar me gusta por varias razones, como por ejemplo que está cerca de La Paz y porque en un tramo muy corto se encuentra uno con el paisaje típico de las zonas secas de la península y con el mar en dos de sus versiones, la de la Ensenada de La Paz, y la de la Bahía de La Paz.

Total. Aunque tengo fotos de años previos, la verdad es que en esta ocasión sigo prefiriendo presentar las que recién tomé en Noviembre.

Pienso que alguna les va a gustar.

Estas son las huellas del viento.





Estas son huellas bióticas (de bichos, pues).







Estas son "cosas" bióticas.










Y estas son huellas marinas.




Todo está ahí. Nomás es cosa de querer verlas.

Aunque debo reconocer que yo jamás hubiera visto a los "hongos de arena".

Eso los vio mi amiga bióloga que me acompañaba.

Ni hablar. Lo malo será en acabar convirtiéndose en aquél cazador al que se le irán todas las liebres.

Pero no le hace, al menos el rabo les lograré fotografiar.

RRS

5 comentarios:

marié dijo...

Precioso, este sitio es un descubrimiento para mí.
Abierto, contemplativo, receptivo, nada antropocéntrico.
La mirada de un ser conectado,
no separado-fragmentado.
Muy inspirador.
Un auténtico placer.
Gracias por compartir tu mirada.

Xerófilo dijo...

Hola Marié:

Para empezar, bienvenida. Qué bueno que te gustó.
Agradezco mucho los elogios y la belleza de tu descripción.
Sin embargo discrepo en un punto.
Y es que sí me considero antropocéntrico.
Sé que lo que anotas es halago, pero quisiera precisar mi punto de vista.
Quizás en algunos de los capítulos de esta bitácora no se note mucho, sobre todo porque la península de Baja California tiene muchos lugares aislados, que son los que me gusta visitar, en mucho para mostrar la belleza de esos lugares, para inspirar tranquilidad o lograr una sonrisa que nos ayude a descansar un poco en este mundo tan ajetreado.

Pero en mi vida soy profundamente antropocéntrico, ya que pienso que, definitivamente, es menester resolver los problemas humanos para empezar a subsanar el grave daño que le hemos hecho a la naturaleza.
En ese contexto, toda la calma o armonía que puedas percibir aquí se transforma radicalmente.

Sea como sea, reitero mi agradecimiento y te invito a regresar y comentar.

Saludos
RRS

*Marianita* dijo...

¿¿saliste sólo 5 veces a tomar fotos a gusto este año pasado?? zaz, no me imagino lo que pudiste habernos mostrado entonces si hubieran sido muchas más. La verdad es que yo creo que tomar fotografías es una actividad silenciosa y privada (no enfrente de cualquiera se pone uno panza abajo). Aunque con mis amigos he tenido ganas de hacer un "tour fotográfico", pocas veces lo he hecho y me he dado cuenta que por el contrario, yo me cohibo jajaa.

me gustó la foto de las florecitas rosas, la medusabolsa y definitivamente ese hongo es una incógnita para mí.

pd: el viento tiene unos zapatotes en forma de serpiente.

QUE TENGAS UN BUEN AÑO LLENO DE SALUD, TRABAJO BIEN PAGADO Y FOTOS :-)

Xerófilo dijo...

Mariana.
Para empezar, discúlpame el retraso en responderte. En alguna medida se explica en lo que que publiqué posteriormente.
Agradezco tus buenos deseos. Me adueño de ellos y te los devuelvo centuplicados con un profundísimo aprecio y cariño.
Sinceramente agradezco que me motives a salir más y fotografiar más. Aprecio mucho la valoración que haces de lo que aquí muestro.
Bueno, a fin de cuentas, siempre diré y afirmaré que eres la madrina de mi blog.
Pero fíjate que lo que si te digo es que es padrísimo salir a lo que tu llamas "tour fotográfico".
El detalle está en escoger bien a los acompañantes, y resignarse con buen humor a lo que a uno le toque.
Y es que:
Si a alguno no le gusta lo suficiente la fotografía, el paisaje o la naturaleza, pues ya se amoló el viaje. Y eso es bien gacho (en términos fotográficos, casi hay que tomar fotos a "escondidas", en términos de amistad, pues hay que disfrutarlos a ellos ¿no?).
Si la fotografía les gusta en forma incidental (para ilustrar el viaje), pues resulta que se ponen a corretearlo a uno con cosas como "pus que tanto ves, ándale ya vamos a seguirle".
Pero cuando uno sale con personas a las que les gusta el paisaje-cosas-bichos-fotografía, es casi como estar solo.
Yo he salido con varios grupos de amistades que pueden clasificarse en alguno de los grupos anteriores. Siempre ha sido grato, pero para fotografiar, obviamente sólo el tercero, o la absoluta compañía de uno mismo.
¿Cuál prefiero? Mi soledad. Pero la tercera es divertidísima. Obviamente no implica andar platicando.
Y es que si uno sale con alguien a quien le gusta la fotografía de la naturaleza, en realidad cada quién jala por su lado. Anda uno como chivo sin mecate. Lo increíble, y lo que hace que valga la pena ese tipo de ejercicio, es que uno se da cuenta de que es como salir con más ojos, manos y patas. Cada quien ve y percibe cosas distintas. Es viajar muchas veces en una sola vez.
Por eso pienso que cuando dices que la fotografía es una "actividad silenciosa y privada" es muy cierto, muy real, pero factible incluso en grupo.
Por otro lado, y entre "fotógrafos", uno entiende cualquier extravagancia de postura, incluso lo de "panza abajo" (que, en realidad, no necesariamente es la más ridícula de las posturas).
Sé que todo lo anterior no te es nuevo. Pero, la verdad, es que hay cosas de las que yo no me hubiera percatado de no ir acompañado. Es decir, esa es la compensación a la privacidad y el silencio.
Y ese es el caso de los "hongos de arena". Habíamos andado separados casi todo el tiempo. En ese momento ya regresábamos hacia el carro para "ubicar" otra "zona" fotográfica. Yo andaba buscando flores o insectos. Por no sé qué razón mi amiga se andaba fijando en el suelo. Y ella los vio. Ignoro si yo los hubiera visto. Pero agradezco no haber dejado de verlos.
Respecto a cohibirse, pues qué quieres que te diga.
A todos nos pasa.
Ciertamente si vas con fotógrafos es más peligroso, porque es factible que haya registro.
Supongo que ahí sólo cabe resguardarse en la ética del fotógrafo-cuate de la naturaleza que dice: "No me ridiculices en público, porque también te ridiculizaré". (nótese que es "en público", en privado si vale).
Regresando a los "hongos de arena".
Crecían en hondonadas muy suaves, pero estaban como a dos metros de áreas en que había plantas. De entrada supongo que son "celulolíticos", pero la verdad no sé.
No los recolecté porque no tenía caso, me refiero a que difícilmente los podría identificar. A mí me parecieron extraordinariamente alucinantes, dada la asociación que tendemos a hacer entre los hongos y la humedad.
Me da risa que les llames "medusabolsa".
Acá les dicen "aguamala". Tú sabes por qué. Cuando uno está nadando el contacto con sus fregados tentáculos arde feísimo. En fin, en realidad están en lo suyo, y son bellas.
En fin. Muchos saludos y que estés bien.
RRS

Xerófilo dijo...

PD. Me gustó tu postdata.
Nunca se me hubiera ocurrido expresarlo así.
Deberías hacer un dibujo-cuento sobre por qué el viento tiene patas de culebra.

Bonita sugerencia (la tuya, no la mía).

Saludos

RRS